¿Es la liposucción láser más segura? Un experto pionero en la técnica lo explica. Foto: Pexels
Incluso con tiempo y esfuerzo invertidos en el gimnasio con entrenamientos regulares, cambios en la dieta y suplementación nutricional, esos depósitos de grasa localizados, que son muy difíciles de eliminar, pueden persistir.
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En tales casos, para quienes se sienten incómodos, la solución puede venir de intervenciones quirúrgicas.
Una de las opciones ha sido la liposucción, pero quienes ya han pasado por este tipo de procedimiento de manera convencional saben lo doloroso que es el período postoperatorio, cuánto tiempo lleva y qué cuidados son fundamentales para una buena recuperación. A menudo, es necesario alejarse de las actividades físicas regulares, del trabajo e incluso del ocio durante semanas o meses.
Hace solo unos años, habría sido imposible someterse a una cirugía plástica un jueves o viernes, aprovechar el fin de semana para recuperarse y estar listo para regresar al trabajo y otras actividades físicas ya el lunes. “En otras palabras, la recuperación en solo 3 o 4 días después de la liposucción. Esto solo se ha vuelto posible en los últimos días gracias al uso de tecnología de vanguardia en cirugía plástica”, dice el cirujano plástico Wendell Uguetto, que trabaja en el Hospital Israelita Albert Einstein en São Paulo desde 2009.
Él fue uno de los pioneros en utilizar la tecnología láser en la cirugía de liposucción en Brasil. “La técnica, al igual que en la liposucción convencional, se utiliza para reducir la grasa localizada en áreas específicas del cuerpo. Sin embargo, la liposucción láser se realiza con la ayuda de una fibra óptica por la cual se emite luz de alta intensidad, y esta luz se dirige específicamente al tejido adiposo, que se calienta y se vaporiza, y luego el tejido vaporizado se elimina del cuerpo”, comenta.
Según el experto, esta técnica se considera más segura que otras técnicas de liposucción porque la ruptura de la grasa no se realiza de forma manual, por lo que no existe riesgo de daño a los tejidos circundantes y hay menos trauma local, lo que resulta en una recuperación más rápida.
“De esta manera, los pacientes suelen experimentar un 50% menos de dolor y hasta un 80% menos de hematomas que en los casos convencionales. A menudo permito que el paciente regrese al trabajo y realice actividades físicas al día siguiente de la cirugía”, agrega el médico.
Además, Uguetto también explica que el láser ayuda a reducir la flacidez de la piel, ya que también estimula la producción de colágeno y fibras elásticas en la zona tratada.
Sin embargo, el cirujano enfatiza que la liposucción láser no es un método para bajar de peso y no debe utilizarse para tratar la obesidad.
Durante el proceso de recuperación, el paciente debe adoptar algunos hábitos que ayuden a acelerar la curación, como la ingesta de líquidos, el uso de medicamentos recetados por el médico, una alimentación saludable e incluso la fisioterapia.